Durante años, cocinar se volvió sinónimo de abrir sobres, usar lo que ofrecía el supermercado, sin preguntarse mucho. Hasta que nos hartamos de sentirnos pesados, inflamados, sin energía… y decidimos volver al origen.
Usamos lo que teníamos: sal de mar, especias naturales, aceite de coco. Nada más. Sin conservadores, sin saborizantes, sin trucos. Solo comida real.
Así nació Cusibani. No como negocio, sino como una forma de resolver algo muy básico: comer sin dañar el cuerpo.
Hoy, esa misma intención vive en cada frasco. Porque cuando te alimentas bien, todo cambia.
Durante 13 años tuvimos certificaciones que respaldaban nuestro trabajo. Desde la pandemia las pausamos, pero nunca dejamos de cuidar lo que realmente importa: tu confianza y tu salud cada día.
La decisión más importante podría estar en tu plato.
Lo que eliges hoy se queda en tu cuerpo… y en tu ánimo.
Cusibani significa “volver a la vida”. Y eso es exactamente lo que buscamos con cada mezcla que preparamos.
Nuestros ingredientes son limpios: sin químicos, sin glutamato monosódico, sin transgénicos. No porque esté de moda, sino porque sabemos que así tu cuerpo funciona mejor.
Apoyamos a quienes cultivan lo que usamos: manos campesinas en Oaxaca, Chiapas, Guerrero, Veracruz, Tabasco, Puebla y Yucatán. Cuando eliges Cusibani, también eliges que esas comunidades sigan adelante.
Nos encuentras en nuestra tienda en línea, en HEB, Alsuper, Mercado Libre, Amazon y en las principales tiendas orgánicas de México.
¿Quieres saber por qué quienes nos conocen cocinan diferente ahora?
En Cusibani no seguimos modas. Desde el inicio reemplazamos lo que te hace daño por lo que te hace bien: jarabe de agave en lugar de azúcar, sal de mar en lugar de sal refinada.
De ahí nacieron sabores únicos que completan tu cocina:
• BISHIÑA: sal de jamaica, betabel y chile. También líquida con xoconostle.
• SALSEBO: sal de mar con cebolla y hoja santa.
• CHICHABA: sal de mar con jengibre.
• DXULADI: pasta de cacao sin leche, hecha con jarabe de agave y crema de coco.
Hacemos lo que nos gustaría que probaras en tu cocina, siempre a mano, con respeto y con ingredientes reales que puedes sentir.
